lunes, 13 de febrero de 2017

Esta historia ya estaba escrita

Esta historia ya estaba escrita, pero yo no lo sabía. No lo sabía nadie, excepto quien la escribió.

Tocó a mi puerta ni bien la terminé.

“Hola, ¿sí?”, pregunté esperando que me respondiera del otro lado un mormón o un vendedor ambulante, pero no. “Soy la persona que escribió el cuento que usted escribió recién”, contestó una voz finita.

- ¿Cómo es posible si lo acabo de escribir?
- No sé, pero es mío

Me habló en tono soberbio mostrándome un documento que certificaba sus palabras. Le respondí sin achicarme: "Mire, yo lo empecé a escribir sin saber que era suyo y nunca lo había leído, así que un poco mío también es".

- ¡Esa historia es mía es mía es mía es mía!
- Si es suya se ve que mucho no lo quiere, porque por algo se vino a mi casa para que yo la escribiera

Al escucharme, el hombre que escribió esta historia se puso a llorar, sabía que había cierta verdad en mis palabras. Pobre, me dio una lástima tremenda. "Fui muy duro, quizás", pensé arrepentido. Se notaba que la quería. De todas formas, no estaba dispuesto a ceder así como así, menos después de recordar la soberbia con la que me abordó en primera instancia.

"No digo que no sea suya, pero en todo caso es de los dos. Aprenda a compartir. Además, ¿por qué le interesa tanto? A mi me parece demasiado rebuscada", dije. A lo que respondió:
- Primero: puede que usted no lo entienda, pero esta historia para mi es muy importante, es como un brazo, una pierna, una oreja... Por eso me niego a compartirla. Segundo, si le parece tan rebuscada, ¿por qué no me la devuelve?

- Porque usted tiene que aprender a compartir
- Es mía, ¡devuélvala!
- No sea infantil
- ¿Usted podría compartir su brazo?
- Sí
- No le creo, a ver

Me saqué el brazo ortopédico y se lo di.

- Úselo tranquilo, me lo devuelve cuando quiera.

Si lo hubiese pensado más detenidamente no se lo hubiera entregado así nada más, ese brazo era muy útil, pero quería predicar con el ejemplo para enseñarle que en la vida hay que ser más desprendido.

Al parecer, mi buen gesto surgió su efecto y el hombre que escribió esta historia se quedó reflexionando unos segundos. Luego rompió el silencio y dijo:

- Gracias, ¿sabe qué? Quédese con ella, se la regalo.
- ¿En serio?
- Sí
- ¡Gracias!
- No hay de qué, ¿puedo quedarme con su brazo unos días?
- Por supuesto
Nos despedimos y el hombre que escribió esta historia se fue caminando por la vereda arbolada, rascándose la espalda con mi brazo ortopédico.

miércoles, 29 de junio de 2016

We

Sobre un fondo negro escuchamos el molesto y estruendoso sonido de una alarma despertadora.

SOBREIMPRIME TÍTULO: "WE"


1 - INT. DORMITORIO - DIA

Desde una perspectiva un tanto voyeur, desde fuera de la habitación, vemos a CRIS (25), sentado en su cama apagando la alarma de su celular, en un estado intermedio entre la vigilia y el sueño.

Se escucha el sonido de una puerta cerrándose violentamente, probablemente la puerta de entrada a la casa.

Cris, extrañado, se pone de pie y mira en dirección a la fuente sonora.


2- INT. COMEDOR - DIA

Cris, de pie en el medio de la habitación, observa a su alrededor, todo parece estar en orden.


3- INT. CORREDOR - DIA

Cris asoma la cabeza por la puerta de entrada de su apartamento y mira a ambos lados del pasillo. No hay nadie allí.


4 - INT. BAÑO - DIA

La puerta del baño está abierta, a través de ella vemos las piernas y las manos de Cris sentado en el inodoro y escuchamos el desagradable sonido de sus necesidades matutinas. Mientras caga, revisa los mensajes en su teléfono móvil.

Instantes después lo vemos frente al espejo, enjuagando su cara y cepillando sus dientes.


3 - INT. COMEDOR - DIA

Cris, vestido con ropa de calle, desayuna antes de salir al trabajo.

De pronto, comienza a escuchar el molesto y estruendoso sonido de la alarma de su celular, lo cual lo sorprende enormemente, ya que a pesar de que lleva el aparato consigo, el sonido proviene de su dormitorio.

Cris, se pone de pie y mira en dirección a la fuente sonora.


4- INT. DORMITORIO - DIA

Comienza a sonar una perturbadora melodía "Lynchiana".

Desde fuera de la habitación, Cris observa a un SEGUNDO CRIS, idéntico a él, sentado en su cama, en un estado intermedio entre la vigilia y el sueño, apagando la alarma de su celular.

Se escucha el sonido de una puerta cerrándose violentamente, probablemente la puerta de entrada a la casa.

Cris, intuyendo lo que va a suceder a continuación, sale de allí y procura esconderse.

El Segundo Cris, extrañado, se pone de pie y mira hacia la fuente sonora.


6- INT. BAÑO - DIA

Cris se esconde dentro de la bañera.


7- INT. CORREDOR - DIA

El Segundo Cris asoma la cabeza por la puerta de entrada de su apartamento y mira a ambos lados del pasillo. No hay nadie allí.


5 - INT. BAÑO - DIA

El Segundo Cris caga y revisa los mensajes en su celular, mientras Cris, aún escondido en la bañera, aprieta su nariz para no sentir el desagradable olor.


6 - INT. COMEDOR - DIA

El Segundo Cris, vestido con ropa de calle, desayuna antes de salir al trabajo.

De pronto, comienza a escuchar el molesto y estruendoso sonido de la alarma de su celular, lo cual lo sorprende enormemente, ya que a pesar de que lleva el aparato consigo, el sonido proviene de su dormitorio.

Cris, extrañado, se pone de pie y mira en dirección a la fuente sonora.


7- INT. BAÑO - DIA

Desde el baño, Cris observa al Segundo Cris observando al interior de su habitación.

De forma cautelosa, Cris se dirige a la salida procurando no ser visto ni escuchado por el Segundo Cris.


8- INT. COMEDOR - DIA

Cris, desorientado, observa todo a su alrededor.

Camina hasta la puerta de entrada y la abre cuidadosamente.


9- INT. CORREDOR - DIA

Cris asoma la cabeza y mira a la izquierda del pasillo, al mirar a la derecha, ve a un TERCER CRIS corriendo y perdiéndose al final del corredor.

Cris cierra la puerta bruscamente y sale corriendo detrás del Tercer Cris.


10 - INT. ESCALERAS - DIA

El Tercer Cris baja corriendo por las escaleras. Segundos después, detrás suyo baja Cris. Con el mismo intervalo de tiempo, detrás de Cris aparece corriendo un agitado CUARTO CRIS, luego un QUINTO CRIS, un SEXTO CRIS, un SÉPTIMO CRIS y así continúan pasando CRIS en un loop perpetuo.





viernes, 13 de mayo de 2016

MUNDOS NUEVOS

PÁG. I

LUPE (60) sola, rodeada de gigantescas dunas móviles, escanea la arena con un detector de metales.

Luego de largo rato, suena el bip bip del detector.

LUPE escarba y saca de la arena un hermoso anillo de oro con un pequeño diamante.

PÁG. II

Anochece en un barrio de la ciudad vieja.

LUPITA (30) camina llevando las bolsas de los mandados, detrás, un extraño personaje vestido con traje de ASTRONAUTA, la sigue de cerca, lleva un casco oscuro que no permite verle el rostro y carga con una pequeña maleta.

LUPITA dobla en la esquina, el ASTRONAUTA también.

LUPITA llega a su casa, abre rápido y se encierra.

Alguien toca a la puerta, es el ASTRONAUTA.

CUENTOS DE BRASIL

El Senado de Brasil apartó temporalmente a Dilma Rousseff del poder.
Los que encabezan el proceso para destituirla, están todos implicados en casos de corrupción y de coimas.
Ayer iba en el ómnibus cuando oí la noticia en uno de los programas radiales más escuchados de mi país.
El conductor abrió el programa diciendo:
"Hoy todo el mundo está hablando de Brasil, la presidenta Dilma Rousseff acaba de ser destituida de su cargo por estar implicada en casos de corrupción y de coimas.
Por eso, como todo el mundo está hablando de Brasil, nosotros también vamos a hablar de Brasil.
"Cuentos de Brasil", llamá y contá alguna anécdota, algo que te haya pasado en Brasil yendo de vacaciones..."
Llamó mucha gente, pero la historia que más me gustó fue la de una señora que contó que una vez alquiló un hotel por internet (en Buzios) y cuando llegó el lugar no tenía nada que ver con las fotos.
Lo peor, según dijo, fue que arriba de su cama había un pelo negro y como le daba mucho asco tocarlo, le tiró una toalla limpia encima y durmió sobre ella.
Por un momento temí pasarme el viaje entero escuchando a la gente llamando para aportar datos y debatir sobre la situación de Brasil. Por suerte se habló de cosas más interesantes, como ese cuento del pelo.

martes, 12 de abril de 2016

Un día

- ¿A vos también te pasa que a veces te sentís sapo de otro pozo?
- Nunca.
- ¿En serio?
- En serio, ¿por qué preguntás?
- A mí me pasa que a veces me cuesta encontrarme en el lugar en el que estoy...
- ¿Encontrarte?
- Sí, encontrarme. Sé que puede sonar raro, pero siento que pienso cosas que de decirlas en lugar de solo pensarlas, muchos entenderían cualquier cosa menos lo que estoy pensando en realidad. El problema es que todavía no entiendo lo suficiente como para poder explicar aquello que creo que estoy empezando a entender...
- ¿A qué te referís?
-  Es algo complejo y medio difícil de explicar, pero me ha pasado de sentir que lo entiendo Todo y parte de entenderlo todo consiste en resignarse a la idea de que no entendemos Nada...
- ¿Todo?
- Sí, pero Todo y Nada.
- ¿Pero todo Todo?
- Sí. Es una idea un media megalómana si te centrás en el Todo, pero si entendieras lo que yo entiendo entenderías de qué hablo...
- ¿Podrías ser más específico?
- Es que es algo muy abstracto como para ser específico...
- ¿Es algo que vos crees que existe pero que no podés demostrar su existencia?
- Exacto.
- ¿Un dios?
- Sí, pero no. Se trata de un concepto parecido pero muy, muy, ,muy diferente.
- ¿Y en qué se parecen?
- ¿Alguna vez de chico (o de grande), jugaste a impedir que una hormiga siguiera su camino?
- Sí, claro...
- Sin embargo, ¿te autodenominarías dios?
- No.
- ¿Cómo creés que te ve la hormiga?
- ¿Eh?
- ¿Te ve como un Dios?
- No creo que las hormigas manejen esos conceptos...
- ¿Creés que ella es consciente de que para vos su vida no significa nada, que estás sólo jugando con ella?
- Supongo que no...
- ¿Pensaste en cómo viven ellas momentos como ese?
- Seguro la pasan para el orto.
- Bueno, yo creo en una fuerza externa que juega con nosotros igual que nosotros jugamos con las hormigas, pero que lejos de tratarse de dioses, se trata de una raza igual o más miserable que la nuestra, que en cierta medida es inocente del daño que nos hace ya que no es consciente del malestar que nos provocan sus acciones.
- E ignora nuestras penas, aunque sufre penas similares a las nuestras por culpa de las acciones de una raza igual o más miserable que la suya, pero que en cierta medida también es inocente del daño que provoca porque no es consciente de las consecuencias de sus actos.
- Exacto.

martes, 20 de octubre de 2015

Bur Buhas

- Dios nos va a salvar...
- Dios no existe
- ¿Qué decís?
- Eso que me escuchás...
- ¿Vos te volviste loca?
- Dios no existe, y si existe es un hijo de puta, ¿cómo va a mandarnos a un lugar como este?
- No está tan mal este lugar, tiene sus cosas, pero no está tan mal...
- ¿Vos vivís en una burbuja?
- Sí, claro, ¿vos no?
- Yo no
- ¿Ah no?
- No
- Mira...
- ¿Qué?
- Nada...

- ¿Vos crees que yo vivo en una burbuja?
- Sí, creo que todos vivimos en una burbuja...
- ¿Y qué tiene eso que ver con Dios?
- Que no sé si existe o no, pero que sirve, sirve. Todos precisamos para vivir construirnos algún tipo de burbuja.

martes, 13 de octubre de 2015

Besitos

Una pareja haciendo zapping acurrucados en un sillón.
Conversan en silencio, se hablan con los ojos.

- ¡Dejá algún canal!
- ¿Cuál?
- No sé, cualquiera.

Pone fútbol.

- No, fútbol no.
- ¿Y qué pongo?
- No sé, pero fútbol no.
- Si a vos te gusta el fútbol amor
- Sí pero ahora no quiero ver fútbol
- ¿Busco una peli?
- Dale

Pone una película de Harrison Ford.

- Esta ya la vimos, ¿no?
- Sí, ¿querés que busque otra?
- No, dejá.

Miran medio minuto.

- Che, ¿soy yo o nos estamos hablando con los ojos?
- Creo que sí, no sé... Vos no estás moviendo la boca pero igual te escucho.
- Amor, me está pasando exactamente los mismo.
- ¿En serio?
- ¡Sí amor!
- ¡No te puedo creer, qué viaje amor, qué locura!

Se miran desconcertados.

- ¿Estaremos teniendo una conversación de verdad?
- Sí, obvio, yo te estoy escuchando y vos a mí...
- ¿Nos estaremos escuchando de verdad o cada uno estará teniendo una conversación imaginaria con el otro?
- ¿Cómo?
- Claro, nos estamos hablando con los ojos, ¿no?
- Sí, va, no sé, seguro que de una forma u otra nos estamos comunicando, algo nos estamos diciendo, por algo hace un ratito que no dejamos de mirarnos...
- Claro, ¿pero nos estamos entendiendo realmente? ¿O yo estoy leyendo en tus ojos algo diferente a lo que tus ojos me están diciendo? ¿Entendés?
- Claro, capaz que creemos que nos estamos entendiendo, que estamos charlando con los ojos, pero en realidad estamos charlando, sí, pero vos me estás hablando de fútbol y yo creo que estamos hablando de cine...
- Exacto...
- Bueno, pero eso se soluciona fácil, levantá una mano.
- ¿Para qué?
- Porque si yo te pido que levantes la mano y vos la levantás significa que me estás escuchando de verdad...
- ¡Claro, si yo te digo que levantes la mano y vos la levantás, entonces me estás escuchando, porque sino para qué vas a levantar la mano así, de la nada! Ya entendí, tenés razón, es la forma más sencilla de saber si nos estamos entendiendo realmente.
- Bueno, ¿vamos?
- Sí, a las 3...

- 1...
- 2...
- 3...

Unos segundos de suspenso.

Ambos desperezan estirando las manos sin dejar de mirarse.

Unos segundo de silencio.

- ¿No habíamos quedado que levanta las manos yo?
- Yo entendí cómo que no, que al final las levantaba yo...
- ...
- ...
- Se ve que estaba todo en nuestra cabeza, estamos teniendo conversaciones paralelas...
-  Sé ve que sí...
- Qué lástima che, me había entusiasmado
- Yo también...
- Bueno, ya fue...
- ¿Seguimos viendo la peli?
- Dale.

Un poco de tele y se vuelven a mirar.

- ¿Me das un besito?

Se dan un besito.

- Te amo idiota
- Yo te amo

Un besito más.